Hablar

Hablar de sexo contigo, tú, que no tienes derecho a entrar en mi cama, tú, con quien pensar en sexo sería casi un incesto, tú, querido amigo mío.
Hablar de cosas vergonzosas y perversas... Reirnos y llenarnos de rubor, contarnos cosas asquerosas, sublimes y triviales.
Y quizás, sólo quizás, dejar en el aire esa extraña sensación de haber tenido un orgasmo, de haber movido las hebras del deseo, de haber compartido algo muy íntimo, de haber desahogado algo instintivo, puro, simple.
Y ni siquiera soñamos con tocarnos.

Saramago en Colombia

"-¿Qué pondrías en tu epitafio?
-Indignado. Indignado por estar muerto. Indignado por no haber podido solucionar los problemas del mundo."

Amigos

De lo que sí me di cuenta es de que no debo tener amigos hombres. Es mejor que ande entre mujeres. Si: le roban a uno el novio, le quitan el puesto y apenas uno sale comentan cómo uno ha subido de peso, pero por lo menos no le rompen a uno las ilusiones, no le muestran la crudeza y la realidad simple de lo que son los hombres. No hay nada más deprimente que estar presente en una conversación de hombres. Ahí se da uno cuenta, como mujer, que un 95% de todo lo que los hombres con los que uno ha tenido episodios románticos le han dicho es falso. Que en realidad lo que importa para los hombres son las tetas; que es mejor no pensar mucho ni razonar muy bien, que lo que recuerdan no es una conversación inteligente (contrario a toooooooooooodo lo que hayan podido decir), sino el buen polvo de la noche pasada.
Cada vez que presencio una conversación masculina me doy cuenta de que a los hombres no les gusta hacer planes con uno, a menos que sea tirar; que sueñan con cada escoba buenona que se les atraviese; que eligen entre nosotras como si de la mejor inversión en la bolsa se tratara, que nos calibran como a caballos de paso y que un hombre, mientras se sienta cómodo, es dificil que cambie de postura.
Cada vez que escucho hablar a dos amigos con confianza frente a mi voy y le prendo una velita a mi ángel de la guarda: "gracias, angelito, por haberme ayudado a levantarme a los hombres que he tenido a mi lado, a pesar de no tener culo, tetas ni estar buena; gracias por no haberme enterado de que soñaban con la París mientras me acariciaban; gracias por no darme cuenta de la manera como me medían o me comparaban con otras -que debían estar terribles, francamente-; gracias por iluminarme para hacer sentir a gusto a los que han estado a mi lado; gracias, en fin, por permitirme creer una vez más."

Búsqueda

Me he levantado con una sensación triste y desesperada. Siento que mi vida es una búsqueda constante, una pregunta permanente. Pero no sé qué busco. No sé cuál es la pregunta y ninguna respuesta (ni siquiera 42) me sirve. Lo grave del caso es que tengo la certeza absoluta y total de que, sea lo que sea aquello que busco, no lo voy a encontrar.
Alguien me ha sugerido el Tao... El río que fluye y al cual debo abandonarme para llegar a alguna parte... Es que se me perdieron los flotadores de bracito!

De un libro muy malo

"En este país vivimos entre la barbarie y la bacanería".

Cartagena Sangrienta... Pronto serás el lugar para que una vampira perdida como yo encuentre presas frescas... 

Es imposible orvidarlos, mis amigos. Ya pronto estaré entre ustedes otra vez. 

Ankálagon el terrible... 

Camorra

Pues nada, hoy me levanté camorrista, y es que uno a veces se cree muy bueno, cree que los principios son su suelo y su certeza, que uno "hace las cosas bien" y de pronto está ese tipo que te cae como una patada en el hígado, ése, que es un sapo baboso, el que metió cizaña con un error que cometiste... y sabes que los alumnos no lo quieren y te dan un dato, medio en secreto, un dato grave, y entonces te das cuenta de que el tipo no es lo que pretende... Y de mal humor, en un momento mal elegido, te desquitas, le cuentas a alguien el dato, y hay testigos. Y entonces te sientes como un gusano, te has portado como un sapo más mofletudo que el otro, estás mostrando ser una persona solapada y vengativa... Tú, que no perdonas en nadie semejante comportamiento, tú, que te crees tan frentera, nada, pura mierda, igualita al estiercol que te amenaza y te hace daño. Y entonces ando furiosa conmigo misma, tratando de enmendar el entuerto, diciéndole al hombre en cuestión el dato en cuestión, pidiendo disculpas a los testigos de semejante acto deplorable y sufriendo mucho porque me doy cuenta una vez más de que sí, soy como todos. ¡Arrrrgggggggggggg!

Esa razón

"Pilar Ternera (...) le permitió a Jose Arcadio comprender por qué los hombres le temen a la muerte."

GGM.

El grupò que acampó en la selva con la elfa... se nota que nos rondó el jaguar. 

Cantando con Pachón al regreso 

Con guía francesa que llegó al Amazonas siguiendo un sueño 

Vista desde la reserva sobre el río 

Atardecer sobre el Yaguarí 

Elfa realmente satisfecha y asustada en lo alto del arbolito 

La Elfa haciendo Canoping en un cedro macho de cuarenta metros... Foto desde arriba. 

Campamento en la selva